Nacedero de Urederra,

y mucho más

El punto turístico más fascinante y próximo es, sin duda, el nacedero del Urederra. El Nacedero con una primera cascada que supera el centenar de altura en un anfiteatro rocoso de notable belleza, a la que siguen diversas cascadas y pozas. El nacederos se encuentra en el Parque Natural de Urbasa y Andía, de gran riqueza paisajística, pastos donde se ven vacas, caballos y ovejas latxas que proporcionan el afamado queso de Urbasa, senderos y deportes al aire libre.

Hacia poniente se encuentra la sierra de Codés con su santuario mariano dominando el Valle de Aguilar. Al este destaca el monasterio de Irantzu con su claustro y el embalse de Alloz con su oferta de zonas de baño y deportes náuticos. Y al sur se localiza Estella, punto neurálgico en el Camino de Santiago Navarro, con un notable patrimonio histórico-artístico, desde donde se puede optar por recorrer la ruta jacobea hacia La Rioja con parada en el monasterio de Irache, castillo de Monjardín e iglesias de Los Arcos, Torres del Río y Viana. Asimismo puede optarse por remontar el Camino hacia Pamplona, deteniéndose en Cirauqui, Puente la Reina (iglesias del Crucifijo y Santiago, grandioso puente medieval) y ermita octogonal de Eunate.

San Martín de Améscoa, nuestro pueblo

Entre las sierras de Urbasa y Loquiz se encuentra el precioso valle de Améscoa junto a la hermosa reserva natural del nacedero del Urederra (uno de los espacios naturales mejor conservados de Navarra), conocido por sus queso y gastronomía.

Este pequeño pueblo con sus 90 habitantes, su frontón cubierto y sus casa blasonadas junto con su iglesia gótica renacentista que data del siglo XVI es el lugar idóneo para el descanso y relajación, ya que es un lugar apacible y tranquilo su entorno rodeado de naturaleza y montes majestuosos. Buen mirador es el de Larregiko, con una nevera e su entorno.